De regreso en Beijing, visité el Templo Yonghe, también conocido como el Templo de la Paz y la Armonía. El antiguo monasterio se compone de varios recintos y plazas alrededor de salones con elaboradas decoraciones. El templo se considera uno de los más grandes de la religión budista en Beijing y se percibe como un lugar tranquilo y bueno para la meditación. La construcción del mismo se comenzó para el 1694 mientras reinaba la Dinastía Qin (la misma del primer emperador de China).

Durante mi visita, pude apreciar a varios locales mostrando su devoción budista por medio de oraciones, reverencias y las ofrendas de inciensos aromáticos. La atmósfera en general era de solemnidad, silencio y respeto, mientras los turistas tomábamos fotos y navegábamos en los humos espesos de varios aromas. La arquitectura de los salones y templos es maravillosa y el dominio de la madera es impresionante. Los detalles en cada pieza de los techos y columnas demuestran la artesanía de primera que se dedicaba durante la construcción de esos antros de meditación y oración. El templo representa el budismo tibetano con un gran despliegue de ornamentos y estatuas que le han ganado el nombre de Catedral Budista de Pekín.

La arquitectura de los salones y templos es maravillosa y el dominio de la madera es impresionante.

Muy cerca del Templo de Yonghe se encuentra el Parque Ditan, donde se encuentra el Templo de la Tierra. Les incluyo varias fotos tomadas en los alrededores del templo, así como fotos del Parque Ditan. En adición, comparto varias fotos de los platos que cené en un restaurante cercano al templo. Les recuerdo que pueden compartir sus comentarios al final del blog y les pido darle “Like” en Facebook si el mismo fue de su agrado.